Seis hábitos para reducir las posibilidades de cáncer de hígado
Beber café
Las investigaciones muestran que el café ayuda a ralentizar o prevenir la aparición del cáncer de hígado. El café ayuda a prevenir la fibrosis hepática. Beber de 1 a 4 tazas de café al día puede ralentizar la infección por el virus de la hepatitis C. Aunque el café caliente reduce eficazmente la posibilidad de desarrollar una enfermedad hepática avanzada, algunas personas deben evitar beber café, como las personas con presión arterial alta u otras afecciones médicas que no son adecuadas para beber café.
Evite las dietas altas en grasas y azúcares.
Las dietas bajas en grasas generalmente pueden compensar la falta de grasa y otros ingredientes (como azúcar o jarabe de maíz con alto contenido de fructosa). El exceso de grasa almacenada en las células del hígado es una característica de la enfermedad del hígado graso no alcohólico. Evite los alimentos procesados, especialmente aquellos que contienen jarabe de maíz con alto contenido de fructosa, que pueden eludir los mecanismos normales de supresión del hambre y control de los niveles de insulina.
Prueba una dieta mediterránea
Una dieta sana y equilibrada es buena para el hígado. La dieta mediterránea contiene muchas grasas saludables, como el aguacate, baja en carbohidratos y proteínas saludables, especialmente pescado. Grasas como el aceite de oliva, las nueces y el aguacate ayudan al hígado a mantener un buen estado y a mantener un peso corporal saludable al tomar la cantidad adecuada de calorías. Los beneficios para el hígado son considerables. El síndrome metabólico está altamente relacionado con la enfermedad del hígado graso no alcohólico.
Consuma más alimentos ricos en antioxidantes, el hígado es una línea de defensa contra el mundo exterior.
Las personas pueden potenciar las defensas consumiendo alimentos ricos en antioxidantes (como los arándanos). Los antioxidantes de diferentes alimentos pueden beneficiar al hígado al reemplazar los antioxidantes naturales que utiliza el hígado para desintoxicar alimentos, químicos y otras sustancias a las que los humanos están expuestos. Además, los antioxidantes también ayudan a reducir la inflamación en diferentes enfermedades hepáticas. Algunos estudios también han demostrado que los antioxidantes pueden aumentar la actividad de las enzimas hepáticas.
Limite el consumo de alcohol
Incluso beber en exceso ocasionalmente es perjudicial y puede provocar hígado graso. Las mujeres y las personas con antecedentes familiares de problemas relacionados con el alcohol tienen un mayor riesgo de sufrir enfermedad hepática.
Haz ejercicio
Aunque actualmente no existe una recomendación oficial de ejercicio para la salud del hígado, algunos datos indican que más de 150 minutos de ejercicio por semana son beneficiosos. Si hay inflamación, añadir más de 60 minutos de actividad es beneficioso para el hígado.
https://www.rd.com/health/wellness/easy-habits-that-reduce-liver-disease-risk/